Pregunta:
Se dice que los 120 no recibieron el poder del espíritu santo y que solo los apóstoles ya que a ellos le fue la promesa. Siguiendo con la lógica o “suponer” si en el capitulo 1:14 dicen que estaban todos “unánimes” (y era los apostoles mas mujeres, hermamos y los 120) reunidos y el capítulo 2:1 (otro día diferente) dice que también estaban “unánimes todos”. ¿No sería lógico pensar que eran todos los 120 también?
Respuesta:
Comprendo su pensamiento lógico, pero le suplico tomar en cuenta lo siguiente:
(1) El último grupo mencionado en Hechos 1 son los apóstoles. Gramaticalmente es de suponerse que “todos” se refiere a este grupo en vez del grupo de aproximadamente 120 mencionado más temprano en Hechos 1.
(2) El siguiente grupo mencionado en esta ocasión después de la venida del Espíritu Santo con relación al hablar en lenguas también son los apóstoles (Hechos 2:14)
(3) Todos los que hablaban fueron identificados por la multitud como “galileos” (2:7,8). No es imposible, pero es difícil imaginarse que todo el grupo de los 120 fueran galileos.
(4) Además, más adelante en el discurso del apóstol Pedro este mismo día, afirma: “A este Jesús resucitó Dios, de lo cual todos nosotros somos testigos” (Hechos 2:32). No hay evidencia bíblica que todos los 120 hubieran sido testigos de la resurrección de Cristo Jesús.
(5) Después de la conversión de unas 3,000 personas, el texto bíblico registra que se hacían muchas maravillas y señales, pero NO por los 120 sino únicamente “por los apóstoles” (Hechos 2:43). Si los 120 habrían recibido el poder milagroso del Espíritu Santo, ¿se limitaría en 2:43 a hablar de las señales hechas por los apóstoles?
(6) En cuanto a la comparación gramatical entre 1:14 y 2:1, en el texto griego las palabras usadas son totalmente diferentes. No son expresiones tan paralelas como parecen ser en el castellano o en el inglés.
Como puede ver ninguno de estos argumentos es conclusivo en sí, pero si acumulamos toda esta evidencia y a ella agregamos el hecho irrefutable que la promesa fue dada específicamente a los apóstoles (Hechos 1:2-5), me parece claro que la revelación bíblica es que los apóstoles fueron los únicos que recibieron el poder del Espíritu Santo en el día de Pentecostés.