Juan 3:3-5

Pregunta:

¿Qué significa o puede significar el “agua” en Juan 3:3-5? ¿Se referirá al bautismo de Juan o al bautismo que habría de venir posterior a Pentecostés?

Muchas veces usamos este versículo para informar sobre el bautismo bíblico donde por medio del agua y la gracia se recibe el Espíritu Santo pero mi pregunta es: ¿Es correcto hiperbolizar este versículo en sentido del bautismo?

Aprovecho para comentarle que cuando las personas que tienen congregciones a su cargo, así como evangelistas no están preparados lo suficientemente cometen el error de hablar del bautismo como algo crucial y urgente por medio del cual la persona pasa de muerte a vida de una forma ipsofacta ( por el hecho mismo, inmediatamente, en el acto) , repiten y hacen una reducción del término como si el acto salvara en sí mismo y perdonara y no su profunda interpretación, reflexión y aceptación, así como que el mismo es un compromiso con Cristo y el decidirse a ser un discípulo, un seguidor de Cristo.

Respuesta:

Estoy completamente de acuerdo con usted que, en algunos casos, hermanos enseñan y practican el bautismo con un concepto que se asemeja demasiado al concepto ritual del Catolicismo sobre el bautismo (con las diferencias importantes, por supuesto, de que no sea para niños y que sea por inmersión).

También estoy de acuerdo que es nuestro deber comunicarle al oyente que se trata de un compromiso fundamentado en nuestro conocimiento y fe en la persona y la obra de Jesucristo y, por supuesto, nuestro amor a Él. Trato de dar énfasis a esto en nuestra serie sobre El Evangelismo Personal especialmente en las lecciones sobre “Discípulos Verdaderos” que sugiero enseñar ANTES de presentar el bautismo como también las que tratan de “La Fe” y “El Arrepentimiento” y “El Evangelio” (en el cual tratamos de aclarar un poco la relación entre el bautismo y la muerte y resurrección de Jesucristo). Lo mismo en nuestro curso sobre Romanos en la explicación de Romanos 6 trato de reflejar lo que Pablo obviamente señala sobre las implicaciones, no solamente del momento del bautismo, sino también de la vida libre del pecado.

Esto dicho, no encuentro significado implicado en el uso de la minúscula (agua) y la mayúscula (Espíritu), primeramente porque no hay esta distinción en manuscritos griegos y segundo, porque los traductores están señalando que uno es un elemento y el otro es una Persona Divina.

Aplicar el agua de Juan 3 al bautismo está de acuerdo con el revivir que ocurre en el bautismo (Romanos 6:3,4; Colosenses 2:12). También parece estar de acuerdo con el traslado al reino de Cristo que ocurre cuando los pecados son perdonados (Colosenses 1:13,14) y cuando uno es bautizado (Hechos 2:38; 1 Corintios 12:13). Menos claro pero siempre importante es la relación entre la obediencia a la verdad del evangelio y el nuevo nacimiento (1 Pedro 1:22,23). Además, la nueva criatura se identifica como uno que ha entrado en Cristo (2 Corintios 5:17) y hay solamente 2 textos bíblicos que conozco que nos enseñan directamente cómo entrar en Cristo (Gálatas 3:27; Romanos 6:3,4). Ambos textos señalan al bautismo como el momento en que entramos en Cristo.

Todo esto también me hace creer que Cristo se refiera específicamente al bautismo en el cual uno manifiesta su fe en el evangelio. Sabemos que dio muchas instrucciones acerca del reino ANTES de Su muerte pero que son aplicables después de ella. Entiendo que esta enseñanza sobre el nuevo nacimiento es una de ellas porque definitivamente presenta la forma de entrar en el reino. Antes de la muerte de Cristo sencillamente anunciaban el acercamiento del reino. El bautismo de Juan NO era para entrar en el reino sino para prepararse espiritualmente para poder recibir el reino cuando viniera (próximamente).