Pregunta:
Usted dice, si no me equivoco, que sólo los apóstoles fueron llenos del Espíritu en el Pentecostés, pero en Hechos 1:15 dice que los reunidos eran unos 120 y que todos fueron llenos del Espíritu Santo.
Respuesta:
En cuanto al ser lleno del Espíritu Santo en el día de Pentecostés (Hechos 2:4), es principalmente asunto del contexto inmediato. La ocasión en la que se menciona a los 120 es cuando Pedro se puso en pie en medio de los hermanos (Hechos 1:14,15) y fue la ocasión de la selección de Matías para tomar el puesto en el apostolado dejado vacante por Judas. Hechos 2:1 introduce otra ocasión completamente distinta y posterior a ese día mencionado en Hechos 1: “Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos juntos en un mismo lugar” (Hechos 2:1).
Aclaro que es completamente posible que los 120 estuvieran presentes allí con los apóstoles pero el último grupo mencionado en Hechos 1:26 como punto de referencia son los 12 apóstoles – Matías con los once – no los 120. PERO el punto clave está en Hechos 2:14 porque nos revela quiénes eran los que estaban hablando en lenguas: los apóstoles. “Entonces Pedro, poniéndose en pie CON LOS ONCE, alzó las voz y les declaró…”.
Además, en Hechos 2:32, al continuar el discurso, el apóstol Pedro los identifica a TODOS ellos como los testigos de la resurrección de Jesucristo: “A este Jesús, resucitó Dios, de lo cual TODOS NOSOTROS somos testigos” (Hechos 2:32). Esto es referencia, no a los 120 sino a los apóstoles que fueron designados como los testigos de Cristo en Hechos 1:8.
Además, la promesa de recibir poder al venir el Espíritu Santo NO fue dada a los 120 sino muy específicamente a los apóstoles (Hechos 1:2-8). Note con cuidado en 1:2 que Cristo dio instrucciones “a los apóstoles que había escogido”. “A éstos” apóstoles se presentó y les habló (1:3). Fueron ellos mismos (los apóstoles) los que Cristo reunió (1:4) y les mandó que se quedaran en Jerusalén hasta recibir poder “cuando el Espíritu Santo venga sobre vosotros” y luego llegar a ser Sus “testigos” en todas partes (Hechos 1:8). Ellos mismos (los apóstoles) fueron los que vieron cuando Jesús ascendió al cielo (1:9-12; vea Marcos 16:14-20). Los 120 no se mencionan hasta después cuando entraron en Jerusalén y subieron al aposento alto.
Por tanto, toda la evidencia, tanto del texto en Hechos 2 como también del contexto en Hechos 1 señala a los apóstoles, no al grupo entero de los 120, como los que fueron llenos del Espíritu y hablaron en lenguas en aquel día.