Pregunta:
La palabra de Dios nos anima a no dejar de congregarnos (creo que se refiere al domingo), (Hebreos 10:25 y Hechos 20:7). El propósito seria para recibir la edificación, enseñanza y fortalecimiento espiritual por medio participar de la oración, cantos, cena, sermón y la ofrenda. Ahora bien surge la idea de reunirse otro día en la semana. Ya para algunos no es suficiente el primer día de la semana para tener crecimiento espiritual. Creo que ayudaría mucho reunirse otro día de la semana pero no encuentro apoyo bíblico para comprobar que para crecer espiritualmente hay que reunir otro día. Según Hechos 2 permanecían juntos pero entiendo que era otra la situación de ellos. ¿Qué me explicar sobre este tema?
Respuesta:
“Perseveraban unánimes cada día en el Templo” (Hechos 2:46) claramente describe una situación especial. No obstante, también establece la aprobación divina de hacerlo. Las instrucciones sobre cuántas veces y por cuanto tiempo sea correcto reunirse no son muy específicas. Sabemos que se reunían en el primer día de la semana específicamente para participar en la cena del Señor (Hechos 20:7; 1 Corintios 11:18-20 [aunque con errores graves en este caso]; 16:1,2). Otras referencias a las reuniones de cristianos no son específicas en cuanto al día u horario. 1 Corintios 14 se dedica a instrucciones importantes sobre las reuniones de la iglesia que incluían la enseñanza, la alabanza, y la oración, pero no menciona el día o los días.
Por tanto, encuentro que sí hay aprobación divina para reuniones de cristianos en cualquier día de la semana pero no hay mandamiento de hacerlo determinado número de veces por semana. Aparte de la cena del Señor y la colecta, Dios ha dejado al criterio espiritual de cada iglesia del Señor la decisión sobre los días y el horario de reuniones para edificar a la iglesia y alabar a Dios (con enseñanza bíblica, oración y cantos).
