Pregunta:
De acuerdo a lo leído en la primera lección sobre “La Biblia: El Modelo Para Nuestro Tiempo”, entendí que el último profeta fue el Señor Jesucristo, entonces ¿cómo se debe interpretar Efesios 4:11?
Respuesta:
No fue la intención nuestra comunicar que Jesucristo sea el último profeta sino que es Él que tiene autoridad absoluta en estos últimos días.
El Nuevo Testamento nos revela claramente que hubo profetas de Jesucristo después de la muerte y resurrección del Señor (Hechos 11:27; 13:1; 15:32; 21:9,10; 1 Corintios 12:28; Efesios 2:20; 4:11).
Todos estos profetas de Dios en la época del nuevo pacto, estaban sujetos a la autoridad de Jesucristo e inspirados por el Espíritu Santo que tomó de la verdad de Jesucristo y la reveló por medio de estos profetas. Le animo a leer con cuidado Juan 16:12-15. Jesucristo declara que había más que revelar a Sus discípulos todavía y que lo haría después de Su partida por medio del Espíritu Santo que vino en el día de Pentecostés (Hechos 2).
También es importante tomar en cuenta que el Espíritu Santo nos reveló por medio del apóstol Pablo que el tiempo de la recepción de profecías nuevas llegaría a su fin (1 Corintios 13:9,10). Al completarse la revelación de Jesucristo por medio de los apóstoles y profetas, ya no hubo más profetas. Si desea estudiar más sobre este texto, lo puede hacer en nuestro curso sobre el Espíritu Santo en la lección titulada “Los Milagros”.
Incluyo a continuación nuestra respuesta a otra pregunta sobre Efesios 4:11 que quizá le ayude un poco más.
“Algunos grupos religiosos piensan que para ser igual a la iglesia del primer siglo, tenemos que estar basados en Efesios 4:11. )Qué explicación podría dar usted?”
Se refieren a tener apóstoles y profetas aquí en la tierra hoy día. Pero no toman en cuenta que:
(1) Cristo es la parte más importante de ese fundamento y El no se encuentra aquí en la tierra hoy día. )Cómo pueden ellos tener ese mismo fundamento sin tener a Cristo Jesús viviendo en este mundo hoy día?
(2) El fundamento de la iglesia YA ESTA PUESTO (I Corintios 3:11). La obra de Cristo, los apóstoles y los profetas ya se cumplío. No necesitamos que Cristo vuelva a este mundo para establecer de nuevo el fundamento de la iglesia. No necesitamos tampoco tener apóstoles y profetas viviendo en este mundo para establecer de nuevo este fundamento de la iglesia. Lo que a nosotros nos corresponde hacer esta estar seguros que NO nos apartamos del fundamento YA PUESTO por ellos que encontramos en sus enseñanzas en EL NUEVO TESTAMENTO. Debemos imitar a los primeros cristianos que “PERSEVERABAN EN LA DOCTRINA DE LOS APOSTOLES” (Hechos 2:42). El fundamento de la iglesia no son los dones espirituales NI los individuos llamados apóstoles y profetas sino LA VERDAD que éstos revelaron y que encontramos en el Nuevo Testamento. La iglesia de Cristo hoy día TIENE apóstoles y profetas (Jacobo, Juan, Pedro, Pablo, Mateo, Marcos, Lucas etcétera).
Espero haber suplementado de manera adecuada la lección que estudia sobre la autoridad de Jesucristo.
