PREGUNTA:
En Marcos 14:9 y Mateo 11:5 Jesús usa la palabra “evangelio”. ¿A qué enseñanza se refería porque El no había muerto ni había sido sepultado ni había resucitado?
RESPUESTA:
Hay varias ocasiones antes de la muerte y resurrección de Jesucristo que mencionan la predicación del “evangelio” o sea las “buenas nuevas” (el significado literal de la palabra).
Vea Mateo 4:23; 9:35; 11:5; 24:14; 26:13; Marcos 1:1,14,15; 8:35; 10:29; 13:10; 14:9; Lucas 4:43; 7:22; 8:1; 9:6; 20:1.
La frase más común en relación al “evangelio” durante este período es el “evangelio del reino” anunciado por Juan el Bautista y por Cristo Jesús. Se trata del anuncio que el reino prometido en las profecías del Antiguo Testamento se había acercado y que el Rey había venido.
Es cierto que después de la resurrección de Cristo “el evangelio” se resume en la enseñanza de Su muerte por nuestros pecados, Su sepultura y Su resurrección (1 Corintios 15:3,4). Pero hay que entender que esto es la esencia del evangelio PORQUE es lo que hace posible la venida del reino y nuestro traslado de la potestad de las tinieblas al reino de Cristo Jesús para recibir la plenitud de las bendiciones prometidas con en el reino de Dios (Colosenses 1:13,14). Por tanto, siempre predicamos el evangelio del reino, pero ya no de un reino venidero sino de un reino presente y eterno. Por este motivo, aquellos que no reconocen que el evangelio se relaciona con el reino y que el reino incluye la iglesia de Dios, no han comprendido una parte integral del evangelio. La obediencia al evangelio del reino resulta en ser trasladado al reino de Cristo Jesús (Su iglesia).