Hechos 2:17-20

PREGUNTA:

¿Qué significa Hechos 2:17 20?


RESPUESTA:

Se trata de una profecía declarada por el profeta Joel cientos de años antes de la venida de Cristo. Esta profecía se cumplió en el día de Pentecostés cuando el Espíritu Santo fue derramado ("Esto es lo dicho por el profeta Joel" Hechos 2:16).

Como resultado del derramamiento del Espíritu Santo en aquel día, el mismo Espíritu Santo dió poderes milagrosos a los hombres (por medio de la imposición de las manos de los apóstoles Hechos 8:14 21; 19:1 6).

El otro aspecto de esta profecía no es bendición sino JUICIO contra aquellos que no acuden a Cristo. Es semejante al anuncio de Juan el Bautista en Mateo 3:7 12. Los que reciben a Cristo también reciben la bendición del Espíritu Santo. Los que rechazan a Cristo van a recibir el "bautismo en fuego". Específicamente en el contexto de Mateo 3 y Hechos 2, es probable que se refiera a la destrucción de Jerusalén de la cual escaparon únicamente creyentes en Cristo (70 años después de Cristo Lucas 21:5 32; note especialmente la semejanza en el lenguaje de Lucas 21:25,26). PERO, por aplicación, definitivamente podemos decir que todos los hombres de toda época que rechacen a Cristo, perderán la maravillosa bendición del Espíritu Santo y sufrirán el castigo de Dios. La única manera de ser salvo es por "invocar" el nombre del Señor (Hechos 2:21 compare Hechos 22:16).

Por supuesto, los poderes milagrosos no iban a continuar para siempre,sino únicamente durante un tiempo limitado mientras fuera revelada y confirmada el Nuevo Testamento (I Corintios 13:8 13). Pero el don del Espíritu Santo (no relacionado con los poderes milagrosos) continúa hasta el fin del mundo (Hechos 2:38,39).