¿Cristiano pecador restaurado?

Pregunta: 

¿Puede un hermano ser restaurado cuando ha caído en la práctica del pecado? ¿Lo perdonará Dios?

 


Respuesta:

Sí. Si un cristiano se arrepiente, Dios perdona y es restaurado a la comunión con Dios. Debe ser restaurado a plena comunión con la iglesia del Señor, es decir que debe ser perdonado por sus hermanos. (Esto es comúnmente llamado: "reconciliarse".) "Hermanos, si alguno de entre vosotros se ha EXTRAVIADO DE LA VERDAD, y alguno le hace VOLVER, sepa que el que haga volver al PECADOR DEL ERROR de su camino, SALVARÁ DE MUERTE UN ALMA, y cubrirá multitud de pecados" (SANTIAGO 5:19,20). En este texto encontramos varias verdades importantes. (1) Un cristiano puede extraviarse y perder su alma eternamente. No se trata de un error que no afecta el destino del alma, sino de ser pecador nuevamente destinado a la MUERTE del alma, o sea la separación de Dios, la PERDICIÓN. (2) No solamente debemos permitir que un cristiano extraviado vuelva sino que debemos hacer todo lo posible por animarlo a volver. (3) Si un cristiano que ha caído en la práctica del pecado VUELVE (es decir se arrepiente y vuelve al camino o sea la vida que Dios exige de Sus hijos) es RESTAURADO, sus pecados son perdonados y tiene nuevamente la SALVACIÓN DEL ALMA.

En I CORINTIOS 5:1-5 tenemos el ejemplo de un cristiano que todavía se reúna con la iglesia pero estaba PRACTICANDO LA FORNICACIÓN. Este tenía que ser QUITADO DE ENTRE ELLOS ( I Corintios 5:13), "entregado a Satanás" (I Corintios 5:5), no para que ya no volviera sino para que reconociera el error en que se encontraba, y que luego cambiara su modo de actuar para la salvación del espíritu. El propósito de manifestar a este hermano que ya no tenga comunión con el pueblo de Dios sino que estaba en manos de Satanás era "para destrucción de la carne" o sea para "matar lo terrenal" en su vida (lea Colosenses 3:5; Romanos 8:13). Es decir, en términos directos: para que dejara de andar conforme a la carne – en fornicación – y volviera a andar conforme al Espíritu Santo para así lograr la salvación de su espíritu – su vida interior. Parece que esto mismo sucedió. La iglesia en Corinto siguió el mandamiento de Dios en I Corintios 5. Más tarde cuando Pablo escribió su segunda carta a los corintios, les dio otra orden con respecto al mismo caso ya que el hombre se había arrepentido – la acción de disciplina tuvo éxito – fue restaurado. Entonces les dijo Pablo: "Le basta a tal persona esta REPRENSIÓN hecha por muchos; así que, al contrario, vosotros más bien debéis PERDONARLE Y CONSOLARLE, para que no sea consumido de demasiada tristeza. Por lo cual os ruego que confirméis el amor para con él" (II Corintios 2:6-8; lea 2:9-11).

Debe quedar claro, sin embargo, que mientras un cristiano persista en la práctica de algún pecado, como por ejemplo: no amar a su hermano, no hay comunión con Dios (I Juan 1:6; 2:9,11). Para que vuelva a tener comunión con Dios por medio de la sangre de Cristo, tendrá que VOLVER al camino de Dios, es decir a la LUZ (I Juan 1:6,7). (Note que la práctica del pecado que impide la comunión con Dios no es solamente fornicar, hurtar, matar o ser borracho sino que incluye también en este caso aborrecer a su hermano en Cristo). Pero si volvemos a la luz podemos estar seguros que nuestro abogado – Jesucristo – por medio de Su sangre nos limpia y recibimos el perdón de Dios.

NO PODEMOS PRACTICAR ALGÚN PECADO y al mismo tiempo SER DE DIOS. "El que practica el pecado ES DEL DIABLO" (I Juan 3:8). "Todo aquel que es nacido de Dios, NO PRACTICA EL PECADO, PORQUE la simiente de Dios permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios" (I Juan 3:9). Esto claramente NO quiere decir que el cristiano no COMETE pecado (I Juan 1:8,10), sino que no PRACTICA el pecado. Si un cristiano practica el pecado es porque ya no es de Dios sino del diablo. PERO esto no quiere decir que no puede volver a ser DE DIOS. Pero por el momento PERMANECE EN MUERTE (vea I Juan 3:14,15). Esto mismo nos ayuda entender que hay "pecado de muerte" y hay "pecado no de muerte" (I Juan 5:16,17). "TODA INJUSTICIA es pecado" (I Juan 5:17). La "paga" de cualquier pecado (si persistimos en él) es MUERTE (Romanos 6:23). La frase "pecado DE muerte" literalmente significa "pecado PARA muerte" o sea "pecado A LA muerte" (versión LA BIBLIA DE LAS AMÉRICAS). ¿Cuál es el pecado por el cual no hay perdón? El pecado que practicamos hasta morir. El cristiano puede pedir a Dios que perdone a su hermano cuando comete pecado. Pero cuando su hermano persiste en el pecado, no puede pedir que Dios le perdone. Lo que tiene que hacer es tratar de RESTAURARLO (Santiago 5:19,20), porque sin el arrepentimiento NO HAY PERDÓN.

Si nos preguntamos, "¿cuántas veces puede uno arrepentirse y recibir el perdón de Dios?". Podemos leer Mateo 18:21-35 que al mismo tiempo enseña que nosotros también debemos perdonar a nuestros hermanos que vuelven a la luz.

Algunas personas enseñan que "pecado de muerte" es un pecado específico (muchos dicen que es la fornicación). Pero ya vimos el ejemplo en Corinto de un hermano fornicario que tuvo la oportunidad de arrepentirse para ser salvo. No es un pecado específico sino que parece ser cualquier pecado que practicamos hasta la muerte.

Frecuentemente citan en contra a esta enseñanza Hebreos 6:4-6 y 10:26-31. Por supuesto, las Escrituras no se contradicen unas a otras. Por tanto, vamos a estudiar estos pasajes en su contexto para ver lo que realmente enseñan.

HEBREOS 6:4-6 Este texto NO enseña que Dios no puede perdonar a estos hermanos que han recaído. Si ellos se arrepintieran, Dios les podría perdonar. Lo que el texto enseña es que ES IMPOSIBLE QUE SEAN OTRA VEZ RENOVADOS PARA ARREPENTIMIENTO. No pueden ser restaurados a la comunión con Dios porque no están dispuestos a volver a la luz de Dios. Han endurecido el corazón tanto que la verdad de Dios no penetra, para producir en ellos el arrepentimiento. Esto sí es pecado de muerte. (Compare I Timoteo 4:1,2; Hebreos 3:7-15)

HEBREOS 10:26-31 En LA BIBLIA DE LAS AMÉRICAS se traduce de la siguiente manera: "Porque si continuamos pecando voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda sacrificio alguno por los pecados" (Hebreos 10:26). Esta traducción presenta más claramente que se trata nuevamente de PRACTICAR el pecado, o sea de CONTINUAR en el pecado. En este caso no hay sacrificio que sea aceptable a Dios para nuestra salvación. Cuando uno rechaza a Cristo y Su sacrificio, YA NO LE QUEDA NADA. No le queda más sacrificio por los pecados. ¿Por qué? Porque según Hebreos 10: en los sacrificios de animales "nunca pueden quitar los pecados". Y según Hebreos 10:12 Cristo ya hizo todo lo que él va a hacer para lograr nuestra salvación: "Cristo, habiendo ofrecido UNA VEZ PARA SIEMPRE un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios". Si rechazamos este sacrificio de Cristo (y esto es lo que hacen las personas mencionadas en Hebreos 10:26-31 y toda persona que deja el camino del evangelio verdadero), no hay ningún otro sacrificio que pueda quitar nuestros pecados. Tenemos que volver a Cristo y Su sacrificio o NO HAY MAS SACRIFICIO por los pecados, ni habrá en el futuro (vea Hebreos 9:27,28).

A veces se enfatiza que el pecado VOLUNTARIO del cristiano es el que no tiene perdón. Es cierto que a veces cometemos pecados por falta de conocimiento (estos son los pecados involuntarios). Pero ¿quién podrá decir que no ha cometido algún pecado VOLUNTARIAMENTE? (NO OLVIDE I JUAN 1:8,10). Todo cristiano ha cometido algún pecado voluntariamente. Pero esto no quiere decir que ya no puede ser perdonado.

Lo que el Espíritu Santo describe en Hebreos 10:26-31 es un cristiano que ha RETROCEDIDO (Hebreos 10:38,39). Es aquel que (en el contexto de este libro) ha vuelto al judaísmo con sus sacrificios que NUNCA PUEDEN QUITAR LOS PECADOS (aplicable a volver a cualquier sistema humano de salvación). Creo que podremos ver esto si analizamos la descripción de estas personas en Hebreos 10:

(1) Continúan pecando voluntariamente (10:26). (2) No mantienen firme la profesión de su esperanza (10:23). (3) Han dejado de congregarse (10:25). (4) Son adversarios de Dios (10:26). (5) Se comparan con aquellos que violaban la ley de Dios (10:28). (6) Pisotean al Hijo de Dios (10:29). (7) Tienen por INMUNDA la sangre de Cristo (10:29). (8) Hacen afrenta al Espíritu de gracia (10:29). (9) Retroceden (10:38,39).

Claramente son cristianos que han cambiado totalmente. Han rechazado a Cristo y Su sacrificio. Ya no quieren seguir conforme al Nuevo Pacto. Retroceden (vuelven) a su antigua vida y religión en busca de otro sacrificio por los pecados: otro sistema de salvación. Les asegura que NO LO VAN A ENCONTRAR porque aparte de Cristo y Su Pacto NO HAY SALVACIÓN sino solamente "una horrenda expectación de juicio, y de hervor de fuego que ha de devorar a los adversarios" (10:27). Si continuamos pecando voluntariamente y rechazando a Cristo podemos estar seguros que estamos cometiendo "pecado de muerte". Nuestra única esperanza es el arrepentimiento. La actitud del cristiano fiel hacia estos hermanos se describe claramente en II Timoteo 2:23-26. "Por si quizá Dios les conceda que se arrepientan para conocer la verdad, y escapen del lazo del diablo, en que están cautivos a voluntad de él" (II Timoteo 2:25,26).

Vea también Apocalipsis 2:4,5,14-16,20-22; 3:1-3,15-19. En estos textos encontramos el mensaje de Cristo a cristianos que estaban practicando el pecado. El mensaje NO ES: Ya pecaron voluntariamente. Por tanto, ya no hay perdón para ustedes. EL MENSAJE ES: ARREPIÉNTETE. De otra manera serás condenado.

"Hermanos, si alguno de entre vosotros se ha extraviado de la verdad, y alguno le hace volver, sepa que el que haga volver al pecador del error de su camino, salvará de muerte un alma, y cubrirá multitud de pecados" (Santiago 5:19,20). "Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restauradle con espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado" (Gálatas 6:1).