Pregunta:
¿Se puede asumir que el fruto de la vid no era parte de la Pascua Judea, sino, un agregado de los rabinos de esa época (lo que confirma que no podemos ser categórico en afirmar sobre el el fruto de la vid fermentado o no)? ¿Se deduce que la pascua judía había dejado el modelo bíblico y transformándose en una tradición de la cual participo el Señor? ¿Pudo el pan haber recibido una adulteración del modelo bíblico más me hace pensar que el señor participo de tradiciones ( justificando las tradiciones hoy para el cristiano)?
Respuesta:
En cuanto que no haya sido parte de lo que tomaron durante la Pascua judía original, no estoy tan seguro porque obviamente bebieron algo con el cordero y el pan. Lo que sabemos es que no fue parte de lo ordenado por Dios con algún significado espiritual dentro de la Pascua. Lo que agregaron los rabinos en épocas posteriores (cientos de años después).
Sí, podemos y debemos ser categóricos en cuanto al uso del fruto de la vid en la cena del Señor porque esto fue establecido por Cristo Mismo como parte de la cena que conmemora Su muerte con el significado de ser Su sangre derramada para remisión de nuestros pecados y, por tanto, el nuevo pacto en Su sangre. En lo que no podemos ser categóricos es si sea o no fermentado.
Que las tradiciones judías en la Pascual al igual que otros elementos de la religión de la ley de Moisés se había deteriorado, es muy cierto y es algo que Cristo Mismo denunció en textos como Mateo 15:3-9. No podemos comprobar que lo que hizo Jesucristo en la comida de la Pascua con Sus discípulos haya sido conforme a esas tradiciones porque estos detalles NO se mencionan en el registro bíblico acerca de la Pascua en el aposento alto. Podemos estar muy seguros que fuera lo que fuera que hizo Jesucristo, lo hizo sin pecar, por supuesto. Pero es muy arriesgado y sin fundamento sólido decidir que haya dejado el modelo bíblico para la Pascua y que esto justifique nuestra participación en tradiciones religiosas que carezca de fundamento bíblico. Contradice, además, Su insistencia en el cumplimiento cabal de cada punto de la ley de Moisés (Mateo 5:17-19). Si Cristo participó de alguna tradición de ellos, tal tradición (1) no invalidaba lo ordenado por la ley de Dios y (2) no adulteraba lo ordenado por la ley de Dios. Entiendo que, por lo general, las tradiciones en sí no son malas ni condenadas siempre y cuando no sobrepasen la autoridad bíblica, no sustituyen por lo que Dios especifique en Su Palabra, no adulteren de alguna forma lo ordenado por Dios, y no introducen como autoritativo algo que carezca de autoridad bíblica. Hay más que decir, sin duda, sobre el tema de las tradiciones, pero creo que esto le ayudará con el caso a mano.