Pregunta: Cuando morimos nuestro cuerpo es sepultado y vuelve al polvo. ¿Cuándo resucitamos volveremos a resucitar con el cuerpo que volvió al polvo?
Respuesta:
Primeramente, creo que vale la pena notar que el hecho que el cuerpo o sea el cadáver se haya hecho polvo no es problema para que Dios lo resucite entero nuevamente. El Mismo Dios que hizo al hombre del polvo de la tierra lo puede resucitar del polvo de la tierra.
Cristo Jesús es la única persona que ha sido resucitada ya. ¿Resucitó Jesús con el mismo cuerpo que fue sepultado tres días antes? SÍ, señor. Naturalmente ese cuerpo fue CAMBIADO – TRANSFORMADO (y el nuestro también lo será), pero era el MISMO CUERPO. Si no, ¿dónde estaba el cuerpo original de Jesucristo? Además El Mismo había prometido que Él iba a resucitar el mismo cuerpo que los judíos destruyeron (Juan 2:18-22).
En Juan 5:28,29 que habla de la resurrección de los muertos en el día final, se trata de aquellos que están EN LOS SEPULCROS ( los cuerpos hechos polvo ) y nos asegura que resucitarán.
En Romanos 8:11 la promesa es que el Espíritu vivificará nuestros cuerpos mortales en la resurrección.
Pero creo que el texto más claro de todos es I Corintios 15:42-44. En la resurrección de los muertos, un cuerpo fue sembrado con una naturaleza cuando murió; el MISMO CUERPO será resucitado con OTRA naturaleza. "Se siembra en corrupción, resucitará en incorrupción". Esto es exactamente lo que sucedió en el caso de Jesús. Su cuerpo mortal (el cuerpo de Jesús era mortal y corruptible como todo ser humano) fue cambiado en cuerpo INMORTAL, INCORRUPTIBLE en la resurrección. "Se siembra cuerpo animal, resucitar cuerpo espiritual. Hay cuerpo animal, y hay cuerpo espiritual", pero es el MISMO CUERPO TRANSFORMADO de lo animal a lo espiritual por el maravilloso poder de DIOS.
En la resurrección de los muertos en el día final, TODOS LOS SEPULCROS se van a quedar VACÍOS exactamente como el sepulcro donde pusieron a Jesús que quedó SIN el cuerpo de Jesús porque había resucitado.
El cuerpo que tendremos será como el cuerpo glorificado de Jesús – ya no animal sino ESPIRITUAL (I JUAN 3:2). No sabemos EXACTAMENTE cómo será, pero si sabemos que será GLORIOSO, INCORRUPTIBLE E INMORTAL.